La puesta en marcha de la Asamblea Constituyente en Venezuela y sus primeras decisiones han vuelto a levantar críticas en el ámbito internacional y siembra el desconcierto en todo el país. La Alianza Evangélica Latina llama a todos los cristianos latinoamericanos a orar para saber “cómo ser sal y luz en medio de esta situación”.

Ha sido en particular la destitución de la fiscal general, Luisa Ortega, la decisión a la que se ha referido la Unión Europea en un comunicado publicado este lunes. Según la UE con esta decisión “se han debilitado aún más las perspectivas de una vuelta pacífica al orden democrático en Venezuela llevando la contraria a sus mensajes de que la paz y la democracia se verían beneficiadas”.

El organismo europeo ha criticado la deriva autoritaria en el país gobernado por Nicolás Maduro, cuyos planteamientos “han incrementado la polarización de una sociedad dividida”.

A estas críticas se han unido organismos internacionales como Mercosur. Los fiscales generales de Brasil, Argentina, Paraguay, Uruguay, Chile y Perú han difundido un documento rechazando de forma “vehemente la destitución de la fiscal general de Venezuela y piden a la comunidad internacional la adopción de medidas inmediatas para promover la recomposición del orden constitucional”.

Mientras en el ámbito político siguen las tensiones, en las calles también se han vivido episodios de violencia.   

ALIANZA EVANGÉLICA LATINA PIDE “ORACIÓN”
Diversas entidades e iglesias evangélicas en Venezuela han mostrado su voluntad de construir y trabajar por la paz en el país. La mayoría mostraron su rechazo a la convocatoria de la Constituyente de Nicolás Maduro. El Vaticano, por su parte, también ha expresado su rechazo, pidiendo la suspensión de la Constituyente.

La Alianza Evangélica Latina ha querido expresar “su dolor y condolencias a familiares y amigos de las víctimas fatales en medio de los actos de violencia acontecidos en la hermana República Bolivariana de Venezuela. Lejos de toda connotación política o ideológica, repudiamos el continuo enfrentamiento entre hermanos venezolanos”.

Desde la AEL se hace “un llamado a las iglesias evangélicas latinas a renovar la oración por el pueblo venezolano en relación a la crisis que esta amada nación atraviesa, para que, en medio de toda esta compleja situación los venezolanos puedan volverse a Dios repudiando así toda clase de maldad y violencia”.

Asimismo se pide a las autoridades y a los distintos actores sociales del país que “busquen en Dios fuente de toda razón y justicia, la sabiduría que les permita encontrar los mecanismos para el restablecimiento del orden y la justicia social en Venezuela”.
Finalmente llaman a la iglesia evangélica en Venezuela a “la ferviente oración, no sólo para suplicar la intervención divina, sino también para recibir las instrucciones de Dios sobre cómo ser sal y luz en medio de esta situación. Dios les guíe con claridad”.


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