Al menos 62 personas han muerto en Portugal tras un “incendio imposible de controlar” que comenzó el sábado en la zona de Pedrógão Grande, una región montañosa de bosque en el centro del país. Es la “peor tragedia humana de este tipo en Portugal”, dijo el primer ministro Antonio Costa.
El país ha decretado tres días de duelo nacional.
Decenas de personas resultaron heridas al huir del “horrible escenario”, según los testigos. Muchos de los supervivientes fueron encontrados en “estado de shock”, después de perder a familiares y amigos.
Muchos murieron mientras intentaban escapar de las llamas. Hasta 30 cuerpos fueron encontrados dentro de los coches y otros 17 cuerpos al lado de los vehículos.
Cerca de 1.600 bomberos han estado trabajando para controlar las llamas. Seis incendios activos siguen siendo motivo de preocupación en el país.
Una mujer que pudo huir, dijo al canal de televisión portugués RTP: “Todos los coches estaban ardiendo repentinamente, incluyendo nuestro coche. Mi esposo y yo ya nos habíamos encomendado a Dios. Pero de alguna manera conseguimos abrir la puerta y correr por los pinos caídos”.
Otro superviviente dijo a la BBC: “Después de que el fuego pasó, todavía debía haber sido brillante, pero estaba oscuro. Había una extraña película sobre los ojos de todos. Uno podría oír los envases de gas que explotaban. Hubo un extraño silencio. (...) No me avergüenza decirlo: estaba orando, todos orábamos. No soy religioso, pero en ese momento, no podías hacer nada más”.
“La tragedia de Pedrógão Grande está sacudiendo el país. Castanheira de Pêra, Figueiró dos Vinhos, Ansião y Lousã son otros lugares donde el dolor y el sufrimiento inundan en esta hora de tristeza”, analizó el domingo la Alianza Evangélica Portuguesa (AEP).
“Lloramos con los que lloran. Oramos por las familias que han perdido miembros de sus familias, oramos por los heridos y por las familias que tienen parientes en el hospital. Oramos por los trabajadores de emergencias, bomberos, forestales y agentes de protección civil, así como por todos los voluntarios que ahora están colaborando con todas sus fuerzas”, expresaron desde la entidad evangélica.
La AEP pidió a todos los creyentes del país que “se pongan a disposición para lo que sea necesario”.
Varios están “en camino al sitio para apoyar el trabajo de las iglesias evangélicas locales”. Las comunidades evangélicas de todo el país han “manifestado su solidaridad y apoyo de diferentes maneras”.
“¡Oremos!”, Subrayaron.
Además, la Alianza Evangélica Portuguesa ha ofrecido recaudar "donaciones financieras que se entregarán a principios de julio para satisfacer las necesidades expresadas por las iglesias y comunidades de la región de Pedrógao Grande".
El número IBAN de la cuenta bancaria es: PT50 0033 0000 4528 2173 89605.
MundoCristiano.tv