El miércoles recién pasado dimos paso a un nuevo capítulo del programa Viviendo el Evangelio.

Como es costumbre, el hermano Juan Isaías comparte con los pastores Hernán Contreras y Manuel Rivas interesantes temas que ayudan a la edificación de la iglesia del Señor.

En esta ocasión, los pastores nos dan a conocer algunas doctrinas necesarias de conocer. Y dentro de estas doctrinas se encuentra “La doctrina de la Gracia Común”.

 

El teólogo Weyne Gruden define la doctrina de la Gracia Común como: “La Gracia de Dios mediante la cual Él da a las personas innumerables bendiciones que no son parte de la salvación. Se le llama común porque es común a todas las personas y no está restringida a los creyentes ni a los elegidos”. Esta gracia común no tiene que ver con la salvación, sino con bendiciones, regalos que Dios hace a todas las personas. Son regalos inmerecidos incluso para aquellos que no conocen el evangelio.

 

Si leemos lo dicho por el Señor Jesús en el Sermón del Monte, en el evangelio de Mateo, podemos ver que el Señor no nos dice “has esto para ser salvo”, si no, nos dice “luego que tú has sido salvo” vive así, para que puedas reflejar a tu Padre Celestial, y que las personas, al ver tus buenas obras, glorifiquen al Padre que está en los cielos. Pero, hay una situación muy compleja escrita en Mateo 5:44 “Pero yo os digo: Amad a vuestros enemigos”. Si somos sinceros, esto es muy difícil de realizar, porque incluso en nuestras propias familias o congregaciones existen personas a las cuales nos es difícil de amar. Y en el versículo 45 nos da el motivo por el cual debemos amar a nuestros enemigos: “para que seáis hijos de vuestro Padre que está en los cielos, que hace salir su sol sobre malos y buenos, y que hace llover sobre justos e injustos”. Es decir, tú debes amar a tu enemigo porque tu Padre Celestial lo hace. Dios ama incluso a los que no están reconciliados con Él. Esto no significa que el amor de Dios se manifiesta de la misma manera con un incrédulo que con un creyente, porque la Biblia nos muestra que el amor de Dios se manifiesta de forma especial con aquellos que están en Cristo. Pero el amor de Dios es manifiesto aún con los que no le conocen. Hay una gracia común de Dios que se manifiesta a todas las personas.

 

A continuación, le compartimos el link para que escuche en detalle lo que significa la doctrina de la Gracia Común.